Seguro de protección de pagos
Última modificación: 29 diciembre, 2020
Qué es el seguro de protección de pagos y cuándo es obligatorio
El mundo de los seguros es complejo y amplio, por lo que no es de extrañar que nos suenen a chino algunos tipos de seguro. Por eso, a continuación, detallaremos qué es un seguro de protección de pagos, cuáles son sus coberturas y cuándo es obligatorio suscribirlo. Con esta información, podremos valorar si merece la pena la contratación de un seguro de protección de pagos.
¿Qué es el seguro de protección de pagos?
Sus coberturas principales y complementarias
El seguro de protección de pagos es un tipo de seguro desconocido para el gran público pero que puede ser de gran utilidad en ciertas ocasiones. Se trata de una póliza en virtud de la cual la compañía aseguradora se hace cargo de la amortización de un crédito —una hipoteca, por ejemplo— cuando el asegurado se encuentra en situación de desempleo o incapacitado temporalmente para trabajar.
Así, gracias a este seguro, la hipoteca, los préstamos, las tarjetas de crédito y otras operaciones de financiación quedarán cubiertas en caso de que no podamos hacer frente al pago de sus cuotas por estar en el paro o por estar incapacitados temporalmente.
Sin embargo, este seguro contempla el pago de estas cuotas hasta un límite determinado en la póliza en cuestión. Así, lo habitual es que esté garantizado el pago de las cuotas de 6 meses consecutivos o de 12 cuotas en meses alternos, de forma que una vez agotado este límite temporal, el seguro dejará de cubrir el pago de estas cuotas.
En cualquier caso, podemos ampliar este seguro las cuotas que queramos, teniendo siempre en cuenta que cuantas más cuotas aseguremos, más cara será nuestra póliza.
¿Cuándo es obligatorio suscribir el seguro de protección de pagos?
El seguro de protección de pagos es una cobertura adicional que los bancos suelen ofrecer cuando vamos a contratar nuestra hipoteca. De hecho, esta práctica es cada vez más común. Así, para poder aprobar nuestra hipoteca, el banco nos exige la contratación adicional de varios productos y servicios como un seguro de vida o un seguro de protección de pagos.
En este sentido, hay que tener claro que el banco no nos puede obligar a contratar un seguro de protección de pagos para poder acceder a nuestra hipoteca. En cualquier caso, el banco nos tendrá que informar acerca de esto y seremos nosotros quienes decidiremos si contratar la hipoteca con el seguro de protección de pagos o no.
¿Cuándo es recomendable suscribir el seguro de protección de pagos? Sus ventajas
Sin duda, el seguro de protección de pagos está especialmente indicado para aquellas personas con empleos inestables o que padecen alguna enfermedad crónica o degenerativa que podría llevar consigo períodos de baja laboral por incapacidad temporal. No obstante, cualquiera puede beneficiarse de él, pues es una buena manera de dejar cubierto el pago de nuestra hipoteca o cualquier otro crédito y que no nos ahoguen las deudas.
El seguro de protección de pagos es una gran opción que debemos estudiar concienzudamente al contratar nuestra hipoteca o solicitar algún crédito. Además, no necesariamente tienes que contratarlo con el banco que te concede la hipoteca o el crédito. Compara lo que mejor te venga y consigue el mejor seguro de protección de pagos.